Crude Foyer
Wallace Stevens
El pensamiento es falsa felicidad: la idea
de que sólo por pensar uno puede,
o se pudiera, penetrar, no se pudiera
sino se puede, de que en verdad se es capaz—
De que allí al final del pensamiento yace
un núcleo del espíritu en un territorio
de la mente, en el que nos asentamos
y nos ponemos la ruin corona de la humanidad;
en el que leemos la crítica al paraíso
y decimos que es la creación
de un cómico, esa crítica;
donde nos sentamos y respiramos
una inocencia de un absoluto,
falso gozo, pues sabemos que usamos
sólo el ojo como facultad, que la mente
es el ojo, y que este territorio de la mente
es un territorio sólo de los ojos, y que
somos seres ignorantes, incapaces
de la más mínima metáfora vital, satisfechos,
al final, allí, cuando resulta ser aquí.
Traducción: Alejandro Arturo Martínez