Tres poemas de María Alejandra Colmenares

todos mis años

         predican la muerte

 

:

sí balbuceo las ondas invisibles

 

:

graznido agudo

 

:

chicharra monorrítmica

 

:

y alguna emulación del mundo

 



 

 

                                                       sólo vivo  :   la pre|dico

Esta madriguera en el costillar,

habitada por anfibios fugaces

de ojos blancos y saliva de hiel,

es abismo.

 

La gravedad de este hoyo,

traga sus frenéticos cuerpos

y el turbulento polvo

- los movimientos dinámicos,

tras la estela agitada,

que ejercen palanca en el declive-

Palestra molecular:

al ojo nada

en la caverna todo.

 

Su magnitud

es la quebrada del frío

cayendo en placas

sin letra en este cosmos

 

la gravedad de este hoyo

es la absorción dinámica

violenta

y final

de cada partícula de luz.


                                        Resquicio


Tras los arcos

fríos están los pozos de sangre

que un día enardecieron

tras punzar aquellas ciruelas

blandiendo en vano las dagas, como cuernos de ciervo anciano




El sigilo

         abre de     a       poco esta zanja




se desparrama sobre todas estas manos que        lloran

lloran                           lloran




Se dilata un ahogo

perpetuo en la laguna tibia

donde estas ruinas se sostienen solas y el eco

es una O que se repite.




Nos hendimos en el vino

del cuerpo desconocido

la putrefacción del herético

y en la piel que se desvela.




Silentes damos cara a la respuesta

y mordisqueamos la última palabra

               antes que fugue.




Entonces la furia no resiste:

ya está todo dado




y en todo,     el presente que se desliza




               blando     proteico




Hemos de acallar protestas bajo los párpados

hundir nuestra estirpe

el quiebre de los cráneos

en la gloria de nada.




La suplencia de la altivez

es entregar el nombre      la letra      la hora.




El secreto es la no-cura

comerse hasta ya no quedar:

la salvación es rendirse







y caer suavemente tras el resquicio              .

María Alejandra Colmenares León (Caracas,1996) es estudiante de Letras en la Universidad Católica Andrés Bello y estudiante de Filosofía en la Universidad Central de Venezuela. Ha participado en un seminario de filosofía con Luis Miguel Isava (2015), y en talleres literarios dictados por Hugo Colmenares (2015), María Auxiliadora Álvarez (2015) y Víctor Alarcón (2016). Ha publicado en Revista Canibalismos y el blog de Proyecto Casquivana. Ha participado en el recital Micrófonos por la Libertad (2017).

La fotografía es de MeGreedy.